viernes, 30 de octubre de 2020

Un paso a la vez

 Hoy decidí pisar lento hacia un camino lleno de incertidumbre
por aquello de los tropiezos y los huecos que llenan el pavimento
con tanta hierba que a veces moja y quema cuando ya no das para más,
y unas cuantas piedras que se interponen e intentan detener a quien encuentren

A expensas de equivocarme sigo con el alma en un hilo
cuando he visitado miles de lugares con un montón de gente nueva,
recorriendo cascadas, bosques, pantanos y jardines llenos de flores
metafóricamente hablando, siendo siempre una loca poeta

Que encuentra en lo mínimo toda una estructura para construir
puentes entre mi cabeza y la imaginación, entre mis memorias y la realidad,
bastando solo un espacio vacío que pocas veces se me da para hacer lo mio
y conseguir tan bellas palabras que hacen de esto un bendito poema

 Como las tan esperadas llamadas en la madrugada que nunca llegaron,
o la serenata de alguien que dijera amarme una noche cualquiera,
todas esas cosas cursis y tontas que juré destruir un día
se vuelven hacía mi queriendo salir de entre los escombros de quien sigue viva


Y todas esas locuras adolescentes siguen dentro mio
arañando todo a su paso dejando un sinfín de heridas físicas,
que las mañanas con resaca ahora ya se han convertido en despertares
siempre a las tantas de la tarde con un dolor de cabeza insufrible
vacilando en todo lo que conlleva la madurez y responsabilidad


Negándose aquella niña a salir del caparazón que alguna vez fue su hogar
esperando ser tan increíble como alguna vez soñó, con heridas y grietas
pero teniendo por escudo el amor propio que va construyendo de a poquito
encontrando miles de formas de llevarlo a cabo, que se vuelve llena de luz


Y todo a su paso va cobrando vida a expensas de los que no la aguantan
o de otros llenos de envidia, que lo de menos son todas esas cosas
cuando ya ha pasado de todo por lograr esa sonrisa con la que se levanta
y sale a comerse al mundo, y suda y grita todo lo que la agobia


Entonces un día cualquiera se toma fuerte de la mano y se abraza
por todas las personas que dejaron de hacerlo cuando más lo necesitaba
y seca esas lagrimas que la han ahogado por dentro sin dejarla ser,
con la mano a la cintura hoy puede con todo aquello que una vez la agobió...

 

 

 


 

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