Esa bendita costumbre que tiene la vida para deshacerme en segundos
cuando lo que tenía por sentado de pronto se me esfuma de entre mis dedos
y de ahí sin más se van descomponiendo mis ganas musitando tu nombre
aunque suene absurdo pues hasta ahora es lo único que se ha quedado
Como si de repente las estrofas de ciertas canciones lograran entendernos
y todo aquello que resultaba tan lejano se me ha vuelto costumbre,
el saber que después de todo aun queda alguien que este dispuesto,
teniendo un montón de miedo pero esperando el mejor de los resultados
Recuesto mi cansancio en aquella almohada que logra mitigarlo,
me envuelvo en tantas cobijas que mi espacio se torna tibio
mientras suena el teléfono anunciándote y por fin te escucho
esa voz que por tantos años parecía haberse ido, ahora vuelve
Presagiando que esta vez sea para siempre, y te creo
porque ya me canse de poner paredes, de volverme de hierro
cuando parece que alguien esta a punto de entrar;
esta vez he perdido la fuerza y he ganado un poco de confianza
A pocos días hay expectativas, nervios, sueños que se sienten muy reales,
palabras que taladran mis oídos y un montón de frases de amor,
tan rápido que no me he dado cuenta el momento en que te colaste
de entre las ventanas e hiciste todo un torbellino de emociones
También quiero todo lo bonito que se pueda, porque ya me lo merezco
te he visualizado tantas veces sin rostro y ahora que lo tienes me encanta,
me parecía tan lejano que ahora que has llegado sigo sin creerlo,
te aguarde como niña bajo un techo mientras llueve y espera que se calme
Creo en las vueltas que dio la vida para traerte conmigo,
empezando de a poquito hasta volverte tan indispensable
que lo único que me queda es aguardarte llena de esperanza,
con todo lo que ahora signifique saberme en tus manos...
jueves, 29 de septiembre de 2022
Añorandote
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