lunes, 22 de febrero de 2021

Incertidumbre

 He puesto en pausa un poco algunas emociones que se me desbordan
entre las comisuras de mis mejillas, y tienen fin dentro de mi pecho,
como cuando escuché aquel primer "TE AMO" acompañado de un dulce beso
o esas caricias que despertaban a una mujer desconocida hasta cierto tiempo

Con las manecillas del reloj jugando en mi contra esquivo algún recuerdo viejo
y mi taza de café se va enfriando hasta perder un poco el sabor
casi de la misma forma en que me ha pasado con lo que llaman amor,
la melodía de numerosas canciones se me ha vuelto extraña

Cuando antes solía cantarlas hasta perder el sentido de la misma,
o bailarlas al ritmo de mis dos pies izquierdos con todo y tropiezos,
desganada me he vuelto a poner aquel viejo suéter que tanto me gustaba
y los jeans rotos que alguna vez sentí hechos a la medida, ahora no me ajustan

Vacilando siempre entre sentirme tan perfecta como unos ojos lejanos me decían
mi reflejo se va volviendo tan desaliñado y gris que ya no hace match,
los zapatos ya viejos me gritan renovar y sin embargo me aferro a ellos
más que por costumbre y comodidad, como todo lo que me ha tocado

Destapo una cerveza a las 3 de la madrugada, con el clima tan frío como mis adentros
y susurro unas cuantas malas palabras por esa pésima combinación,
pero lo disfruto porque ese sabor amargo me es tan familiar
sintiendo como algo me falta, no logro descifrar la sensación de ausencia

Me acomodo un poco el cabello teniendo la idea de cortarlo un poco,
tal vez hasta el hombro al punto de querer empezar de nuevo
y sentir que todo en esta vida tiene su ciclo y cual fuera ya terminó,
pero no lo logro, vuelve mi cobardía y me tumbo en mi cama

Con la vista en el espacio deseando tener el control de nuevo de mi yo interna,
me recojo la maraña en una coleta y atino solo a ponerme un poco de rimel
esperando otro día más que por lo menos no vengan esas ideas a confundirme
sorteando la poca cordura que me ha dejado toda esta incertidumbre...






sábado, 6 de febrero de 2021

Escala de grises

 También se valen de vez en cuando los días malos
las camas destendidas y el alma gris, aunque jure odiar ese color,
la autocompasión por sentirme apenas un alfiler en este mundo enorme
lleno de hermosos rostros y extravagantes cuerpos bien trabajados

Sintiendo no ser suficiente a las 2 de la mañana cuando el reloj presiona la cabeza
y hay un nudo enorme que no deja paso al descanso y los sueños,
como repitiendo esa canción tan triste que nunca antes tuvo tanto sentido,
sabiendo que al otro día es necesario cumplir con la rutina y ser adulto

Esperanzada en no se que demonios, porque los míos me han hecho una mala jugada
y ahora mismo saboreo un millón de palabras amargas que se van abriendo paso
plasmando solo un poco de todo lo que llevo dentro, golpeteando el corazón
que se ha ido resguardando muy al fondo en una mujer con semblante rudo

Esos días en los que da igual el color de blusa que escojas, o el peinado que uses,
siguen teniendo el mismo resultado cuando no logras hacer las pases con la del espejo
(aunque siempre haya esa guerra constante entre lo que tu ves y como te sientes)
navegando contra corriente aunque no sepas hacia donde se dirige

No teniendo idea de como nadar, hay espacio siempre dentro del bote
para los salvavidas que llegan disfrazados de personas con momentos bonitos,
de música que te hace bailar, de pasteles que puedes saborear una tarde común
con tu hermana al lado sin saber realmente cuanto bien te hace

Cual niña con juguete nuevo, así se siente una escritora con una hoja en blanco,
situando esas palabras y volviendo un poco más bonito el pesar, los miedos
desenredando cada hilo de esta historia y poniéndole uno que otro adorno
para hacerlo más llamativo al ojo del espectador cuando por aquí se pase

Se dice que un poeta con el corazón roto suele escribir de lo mejor
pero no nos hablan de los contratiempos del paso del tiempo,
de como muchas veces pesan tantas cosas que terminan por tirarnos
deseando que alguien nos brinde una mano o un espacio dentro suyo...